sábado, 26 de novembro de 2016

ADÍOS FIDEL!



Adíos Fidel

          Há dois meses fiz uma promessa e não subi as escadarias da igreja da Penha, isso é coisa para político fazer, e a igreja é cercada de favelas e comunidades, não sei bem a diferença entre esses termos sociológicos, porém sei que o primeiro é feio e pode carregar ranços de classes que se ignoram, para não dizer, vivem mundos completamente diferentes... Seria algo assim: comparar os fiordes do Canadá com Cuba ou o oeste americano com o complexo do alemão, sabem o que é? Um labirinto de pacatas ruelas onde entrei para buscar uma cadela dog-alemã preta, ano passado. A bicha era brava mas tava doente, cheia de carrapato, pulga, com sarna, um tumor benigno nas costas e mal tinha forças para subir no banco de trás do carro. Passei pela “barreira comunitária” falando que “era da Suípa”, outra hora escrevo uma crônica apenas sobre ela, nem sei o que estava fazendo lá, sair da minha casa para adentrar o Vietnã, tão próximo, um surto com certeza. Ela já mordeu minha mão num dos seus acessos cólera e não fui me vacinar contra a raiva silvestre, mesmo sabendo que a população de morcegos é três vezes a população honesta e eles que transmitem tal doença hehe  Falava da promessa, porque raiva furiosa, aquela que baba, só existe no norte e nordeste do país, qualquer semelhança com coronelato é mera coincidência... E fiz no Reveillon: só leria jornal positivo para o povo brasileiro. Hoje arrisquei novamente quebrar o prometido, acessando de costume páginas e páginas virtuais. Levei um susto dobrado: Fidel renunciara ao poder! E pasmem, o explorado Brazil já possui reservas suficientes para quitar a dívida externa e ainda ficar com troco para aplicar na bolsa. Esfreguei os olhos, será vírus no computador? Já andam alterando até as mãos de simples leitura no Word, copiando e colando nossas esperanças? Que notícias intrigantes, parei pra pensar: como um doente renuncia ao poder? Choram que nem crianças quando perdem eleições, sei lá, alguns são até legais, e sempre voto nesses idiotas porque sou um eleitor mais que idiota, sou consciente!  Sonhava em conhecer o mito de Sierra Madre, apenas para apertar a mão e dizer  adolescente: valeu, como o mestre Jabor fez e relatou. Eu apertaria dizendo, valeu! O senhor quase conseguiu exterminar a humanidade na crise dos mísseis em 62, ainda barbado e jovem, e com certeza a história o absolverá! E contaria com vocês para acionarem a Anistia Internacional, os grupos de Direitos Humanos, caso ele se aborrecesse com minhas idéias. Contaria com os advogados também, sempre tão mal falados, aqueles que lhe tirarão do xadrez, que lhe defenderão quando lhe derem um tapa na cara! E toda  autoridade se omitir, restará um advogado.... Até a filha dele, a irmã, fugiram para morar nos Estados Unidos, de barca, canoa, qualquer pedaço de tronco, como os índios ancestrais faziam. O que faz alguém fugir? A falta de Liberdade? Eu sonhava em fugir, em ser exilado em Paris, ter alguma luta para crer, e os shoppings, os intelectualóides do PT não deixaram! Eu queria ser como o Brasil, queria quitar meus cartões e nunca mais usá-los! Nunca mais viajar, nunca mais assistir mil novecentos e cinqüenta e nove filmes (se não foram o dobro) esquecidos por anos de insônia e agora escrevo. Depois de tantos Iraques, Somálias e Haitis, continuam jogando comida fora e exaltando socialismos de prédios depredados, ferro-velhos nucleares e clãs milionários no poder. Engraçado, chance de ir a Patagônia tive, iria pelos charutos monte cristo, pelo charme de circular em carros antigos e pela tranqüilidade de algum resort, bebendo tequila plata com uma cereja só. Viva Kruschev! Que mesmo pobre e rude nos salvou e jaz enterrado longe dos mausoléus, porque foi expulso do partido. De resto é adíos Fidel!

Dr Guto levará sua dog alemã na caminhada dos advogados...



quinta-feira, 14 de abril de 2016

Bilhete de Paciência



Nota de Paciencia


Hoy en día podemos reclamar de muchas cosas que pensamos son erradas y continúan erradas. La diversidad de comportamientos y formas de consumo cuando no chocan el egoísmo, arrebatan enaguas y labios en los cultos dominicales con idéntico sonido cantado! Podemos apelar al discado-denuncia ó con gritos de silencio. Se fue olvidando, Dios perdona. Las fotos multiplicaron más y más celulares colgados en viejos, riñones y pulmones, escondidos en bolsas u olvidados sobre bancos de laboratorios, cuando fueran ha hacer exámenes….

La tranquilidad de una gran ciudad, sólo llega a altas horas de la madrugada, excluidos los gemidos de camiones de basura o motos que pasan sonando. Las señales cierran para la nada, iluminando el vacío y avanzan con prudencia, es cuestión de sobrevivir. A cualquier momento surgirá una sombra que se aproxima, alguien que grita y se levanta de la tumba! Silencio sepulcral. Fin de noche ó en plena luz del día, pésimo será y no volverá por el ataque de las sombras ó por el bulto que quedo distante al acelerarnos: su ida tocara helado sonido de un teléfono…. No adelanta tener un celular apagado y uno fijo retirado “de las listas”, la policía descubrirá vecinos y voces de terceros darán la noticia… Accidental!  Repentina riqueza de los seguros y fuente de los inventarios. Los ricos planean todo, la clase media copia. Cuando es dolor anunciado, transfieren rápido inmuebles, vehículos y aplicaciones, destinan testamentos y cada flor del entierro es milimétricamente escogida por una pariente desocupada (listas digitadas en el computador).

¿Para qué pagar impuestos y costos de una Justicia cara y elitista si somos más inteligentes? Somos los pobres de ese país, donamos en usufructo nuestros empleos por los valores que quisieran obtener y tenemos un mes de vacaciones que aún no podemos vender…. ¡Los bancos sólo negocian papeles! Compraron nuestras vacaciones y parte de nuestras vidas. ¡Los clientes serán siempre afectados y congelados! Acciones, pólizas de seguros, deventures, algunos ceros a la derecha de extractos consolidados vía e-mail por personas físicas que tornan jurídicas y compran otras personas. Complicado juego de declaraciones. Los abogados saben y son pacientes: ni todo puede ser programado. Planto un árbol, hizo un hijo, escribió un libro ¿y ahí? El sueño de la Mega Sena es un billete premiado en el basurero, ¿olvidaron de chequear?

Donan fortunas en familia a los más nuevos y los más nuevos mueren...
La seguridad falla. Sorpresa sonando 4% de la ganancia y pueden volver veinte años al filo, ni así alguien deja de existir en los réditos federales, en el terminal de consulta, en el anaquel –apenas un número y era elector-… O no tenia un “pandero”, una tarjeta de cuenta corriente (con saldo negativo), un bolígrafo sin tapa y un ataúd de paño simple, ni seguro ni casa, también no importa: De compensado o madera noble, ¡conseguiría cerrar la tapa!
Mejor que fuese cremado y tirado al viento.

Los mejores años de nuestras vidas tal sean los de Facultad y quedamos ansiosos por formarnos. Después  una avalancha de cuentas, cansamos de los noticiarios de la noche y los amigos se apartan… Allá por los años 86, aún no habían celulares que persiguiesen a los estudiantes por el agitado corredor del 7º piso de una Universidad de concreto. Una voz conocida me cerco: “Guto, corre a la secretaría, tienes una llamada urgente”.

Un recado así no había recibido nunca, sin embargo resistente, recuerdo haber ido medio despreocupado a atender, sin preguntar quién era. Atendí a mi hermana rápidamente: “¡Guto, invadieron nuestra casa de playa! Los Sin Tierra ¡, ¿me estas oyendo?” y continuo  ordenando que saliera Ahora de ahí, que tomase el arma de papá si fuese necesario, acompañado de policías tomar las providencias –¡era urgente!-  Mi lado rabioso luego pienso que eso no quedaría así, que aquí nadie puede tener nada, un poco y ya seriamos secuestrados, me voy para Miami etc. Sólo conseguía responder con monosílabos tipo “ya”, “ya” y “haré lo posible”. Colgué. Mi segundo problema jurídico. Ya ganaron un Monza Hatch blanco, con techo solar y ruedas de magnesio para no dejar la Facultad de Derecho =)

Planeaba estudiar Cinematografía, hasta imagine la escena: en pie sobre el asiento, techo descubierto, de anteojos oscuros, un chofer mujeron tendida (La Farrah Fawcet en la época) apuntando aquella escopeta doble que quedaba envuelta en un paño verde detrás de las chompas, en el armario y los cartuchos eran rojos, divididos en cuatro (dumdum), ¡tenía una caja intactos!

Llegaría cerca de ese condominio sin saber cual objetivo acertar: eran más de quinientas rubias iguales, financiadas por la Caixa, de dos cuartos, sala, baño, cocina, entregadas sin al menos una varandita, por un constructor Fuad Zacharias asociado a otro señor pobrecito llamado Sergio Dourado (Una de las cuatro ejecuciones inmobiliarias que lanzaron, apenas en ese año 81), en una ciudad litoránea donde aún no había McDonald´s ni royalties del petróleo, ni esqueleto de un segundo puente. El dinero lo recibían al contado del Banco, pero no se importaban de usar arena de la playa en las construcciones… Bien, ¡invadieron y muchas!  Los propietarios al recibir las llaves, muchos eran argentinos conmocionados por la crisis económica y no conseguían pagar las cuotas que luego en los primeros años doblaron de valor. Parte fue recomprada por el Banco Itaú, que promovió desalojos forzados y judiciales.

Era época de Hiperinflación, confusión/caos, mesas de open, Bemoreira/Ducal, casas de Banha, Mesbla, Coroa/Brastel, efectos Delfín sobre los auspicios de la Pam Am… y teníamos un General Presidente que sólo hacia montar a caballo y amenazar ruleta rusa. No use armas. Estábamos en la nueva República y las invasiones seguían por la década del 80 y pienso que continuaban, crisis social.

Fin de semana siguiente, llamé a una amiga itálo-brasilera para acompañarme sin decir nada a ella o a mi familia y armados de carpas de playa y protector solar enrumbamos para la región de los Lagos. Allá llegando (ella era tan burra, que la deje en el carro oyendo música). “¡Voy allí, a resolver un problema!” Me aproximo, todo parece calmo y las puertas estaban abiertas. Una carroza con neumáticos de caucho estacionado en el piso de grama, cansada, inclinada para el cielo y cerca algunas gallinas que corrían en medio de niños. Fui caminando, una cuerda de nylon verde ajustada hasta la reja secaba ropas. Un caballo relinchaba amarrado al tronco que está en el medio del terreno y florece verde y amarillos todas las primaveras.

Descubrí cuando mande que el jardinero derribase el árbol, porque era feo… “¿El Señor va a derrumbar ese “Palo Brasil”? Nunca llamaría más para la estética, deje los dos allá y planté otra “flamboaya” en el frente, algunos cocoteros, dos troncos de plátano, un pie rastrero de maracuyá, piña y uno de papaya que murió. El jardinero también murió y pasaron meses de mato alto, hasta que supimos la noticia… Un cabo frío rural, distante del centro y pequeños rebaños vacunos pasaban por la puerta, siempre una señora con más de treinta cabras, cabritos y cabros negros cachudos, blancos y fuertes, cachorros corriendo, cruzando la vía vieja de Búzios; sé que vive por allí, no sé si ya fue invasora o expulsada de algún lugar. ¿Dónde estarían los adultos? ¡Fui entrando, al final la casa era mía y cómo son felices esos lugares de veraneo!
Poco vamos a disfrutar el balanceo de una hamaca, usar el regador, pasar una tarde en Itapoã o simplemente jugar a las cartas, conversando hasta caer la madrugada.

Nadie allá, con excepción de objetos desconocidos, un acordeonsero de barro me llamó la atención.
Esteras de paja y fardos amarrados y en el baño jaulas colgadas con pajaritos, ¿Quiénes son los Sin Tierra o Sin Techo? Millones que viven vagando y un día paran cansados, allí unos doscientos hicieron hasta una Asociación (APIB, la “i” es de Invasores). Una niña mayor, tal vez diez  años se aproximo acompañada de otros menores y pregunto “¿Quién es Usted?”, respondí diciendo ser “Guto” y pregunte donde están sus padres. Quedo callada y después murmuro un “salieron”. La tarde escaldaba el sol y la otra ya bocinaba frenéticamente llamando la atención. Resolví ir al mar a distraerme.
Volveríamos en una hora, sin el cáncer de la preocupación, ¡sin celulares!

Re escribir esos momentos con la mayor fidelidad y como decir lo que sentí solitario, descalzo, de bermuda y camiseta regata, blanca por coincidencia. El sol continuaba brillando, pero no había carroza, ningún animal o niños cerca jugando. Puerta cerrada y cinco adultos que intimidaban. Un muchacho aseguraba la hoz, amenazaba y miraba con odio. El papá era moreno canoso, barrigón, candidato a un infarto y sudaba mucho… Machete en la cintura y algunas mujeres con herramientas en el círculo. No tuve miedo y rompí el silencio diciendo: “¿Entonces, el señor no tiene casa, verdad?”.

MI amiga estaba gélida en el muro, como un marmoteado arrancado a la mala por el golpe. El hombre quedo mirándome y respondió fijando sus ojos: “ya trabaje mucho en esta vida y no tengo nada”; saber que decir –palabras difíciles- Era muy joven para decir las verdades del mundo y nunca guste, pero tenia dignidad, recordé de eso: “el señor tiene su dignidad”; en el momento se callo. Calmadamente continué, sintiendo firme la grama y reconociendo el acento nordestito del joven que en paralelo “de aquí nosotros no vamos a salir, etc.”; “vine sólo ha hablar con el señor, porque sé que él va a entender, si esa casa fuese abandonada, pero tiene dueño”… y a los pocos fuimos bajando el tono de la intriga, sin ofensas, sin política, sin dinero o amenazas. Pensando hoy ni sé como conseguí. Hablamos de Ceará, del tren que corta la mata y va hasta Juazeiro y ellos eran de la sierra, del frío de quien bucea en “cascadas” cearenses y un día pararon por allí, venidos de las “chapadas”, de los campos, de los Goytacazes.
Me sirvieron agua de pozo y acepte. Al atardecer salí en duda, con pena de ello y rabia de los políticos. Sabría cuando volviese, un mes después, plazo dado para la desocupación. Demore un poco al volver y con apoyo de una hermana sensata, dos meses volaron para felicidad de encontrar un refugio vació y los pocos muebles en el lugar.

Llevaron el motor del refrigerador, cortinas, utensilios lo que fuese fácil de cargar, pero la puerta estaba junta y un rayo de sol brillaba en la cerámica –conmemorando el derecho amigable- No necesita apelar al lado implacable de la Ley. Al reparar bajo la puerta, un papel de pan, sucio de polvo, estaba rasgado al medio, cuidadosamente sobrepuesto, un pedazo sobre el otro ¡una nota de Paciencia! Quien escribió podría haberlo picado, no lo hizo, en cierto momento tuve rabia y rasgo y pienso mejor.
Junte el mensaje, acompañando los garabatos: “Doctor Guto, usted es buena gente. Que Dios este siempre cerca suyo”. Casi veinte años después, esta nota está guardada y construyeron una Iglesia Católica en la misma cuadra.


Rio de Janerio, 12 de noviembre de 2004
Abrazo del Dr. Guto


sábado, 4 de outubro de 2014

QUERIDOS LEITORES


                                

    Queridos leitores, desculpem não atualizar este blog, na verdade foi um presente que fizeram para mim e acabei postando de vez em quando algum texto... Espero que gostem e obrigado pela visita!


Dear readers, sorry for not updating this blog, actually it was a gift made for me and I ended up posting every now and then some text ... I hope you enjoy and thanks for visiting!

Queridos lectores, lo siento por no haber actualizado este blog, en realidad fue un regalo que hice para mí y yo terminé publicando cada ahora y entonces algún texto... Espero que les guste y gracias por su visita!

Chers lecteurs, Désolé pour la non mise à jour de ce blog, en fait c'était un cadeau que j'ai fait pour moi et j'ai fini par poster chaque maintenant et puis un texte... J'espère vous plaira et Merci de votre visite !

Cari lettori, ci scusiamo per non aggiornare questo blog, in realtà era un regalo che ho fatto per me e ho finito per distacco ogni ora e poi qualche testo... Spero vi piaccia e grazie per la visita!

آسف لعدم استكمال هذا بلوق، في الواقع كان هدية قدمت لي القراء الأعزاء، وانتهى بي الأمر نشر كل الآن وبعد ذلك بعض النص... أمل أن تستمتع وشكرا لزيارتك!

Уважаемые читатели, извините за не обновления этого блога, на самом деле это был подарок я сделал для меня и я в конечном итоге проводки каждый теперь и после этого некоторый текст... Я надеюсь, вам понравится и спасибо за посещение!



quinta-feira, 16 de maio de 2013

GALINHAS TROPICAIS


 GALINHAS TROPICAIS...


                       Poucas oportunidades chocam-se com os arautos da inferioridade que pensam, a priori,  serem os galináceos exclusividades das repúblicas de bananas ou vindas em périplos marítimos, direto de Angola, para infestar os carnavais e casas de fundição do Novo Mundo. Enganados lusitanos sempre competiram entre si, esquecendo as “nações amigas” e digníssimas e airosas esposas. Trouxeram ensopados de uma Santa Inquisição, que não atingiram as terras temperadas do Norte. Lá, as verdadeiras aves de rapina espalharam-se em pratos e burgos, maqueadas nos castelos ou do lado de fora dos castelos...
                Claro que não pretendo exaltar a última esposa de Henrique VIII, pois se todas tinham seus méritos, desde uma plebéia Ana Bolena, até aristocráticos pescoços brancos, cortados pelo machado de quem usa capuz preto e fala pouco: a esta  anglicana coube a glória  vingança ! Para desespero dos que criam galinheiros ou são “caixeiros viajantes” não muçulmanos. Rainhas casadas ao nascer de princesas, nada mais eram que damas-de-companhia daqueles varões assinalados que lhes desposassem no quarto, à luz morna de candieiros ou vela derretida. A honra lavava-se com sangue e duelos,  “protegidos” pelos fiéis escudeiros, que ficavam, domésticos armados chamados filhos de servos. Assim difundiu-se a Moral dos sapateiros, ferreiros, mascates e artesãos, que pelas “corporações de ofício” nos tempos Modernos, colavam-se aos caprichos da realeza. Os comerciantes mais ricos ganharam escarlates títulos de nobreza, escalando muros e torres, e tanto puxaram os cabelos de Rapunzel que surgiram as livres cidades, com suas perdições peculiares : temperos bruxos de “sete saias” e donzelinhas. Os protestantes protestavam contra as galinhas! E nas madrugadas, degustavam canjas e coxas... Os prostíbulos eram profanos becos e tabernas de afirmação masculina, onde os Príncipes calavam-se à realidade das ratazanas, correndo junto ao mijo das ruas ou cobravam ducados...
              Boa viagem pela memória, porém as galinhas que refiro-me agora, não estão soltas pelo calçadão noturno de alguma cidade, seja nos postes de Budapest, Londres ou São Paulo ou bem vizinhas daqui, na Praça Paris, no Largo do Bicão ou  apinhado de “inferninhos” do  Lido, nem estão em frente ao Restaurante Nogueira; próximas sim, onde abriram o primeiro túnel em direção ao bairro de Copacabana,  algum número  perdido,   naquele  antigo sobrado da rua do Barroso... Estavam ali, apinhadas e banhadas por mangueira, dobrada pelos braços de um português comerciante (caneta pendurada na orelha), que nem importava-se em  molhar a grade, por demais enferrujada e suja. Em pleno Século XXI, no coração de um bairro urbano e poluído, galinhas vendidas vivas aos cozinheiros. Caminhando por tão familiar calçada, lembrei das palavras de uma senhora, lá num sítio em Nova Iguaçu, perto da reserva ecológica de Tinguá, aonde íamos inocentes no fim da década de setenta, sem saber que já fora refúgio de uma luta armada brasileira, pois o pai do Flávio (com quem ia; hoje é policial federal), era exilado e cunhado da dona do sítio (modelo casada com cônsul Italiano). Lá escondiam seus amigos e trabalhava uma “preta velha”, muito rude, seguidora fiel de Escrava Anastácia; certa vez falou: “garoto, o que você está mexendo nas galinhas? Eu já matei elas.” Protetor dos animais já aos treze anos, perguntei por que torcia o pescoço com tanta força e por que  guardar o sangue numa bacia? Ela respondeu meio irritada: “garoto, é assim que aprendi! O sangue que dá gosto na comida : essa é  carne caipira”. Não sei porque diálogos surgem pelos frigoríficos de hipermercados onde compramos frangos congelados; é que tempos depois, conversando com um maitre de um vagão-restaurante, ao indagar se a carne de frango estava macia, o mesmo  respondeu-me em Inglês : “lamento, não estamos num TGV1 francês, nem a galinha é caipira”. Detalhes culinários que extrapolam fronteiras, talvez o bom paladar, senhoras e donos de restaurantes sejam os clientes em potencial daquele velho comerciante, que resiste em sacas de milho, no meio da metrópole. Têm razão.
               Volto-me às vagabundas de todos os tempos ou vagabundos, que também existem os galetos e deputados de aluguel nos classificados jornais e inúmeros sites , modernidade a serviço dos que cansam de belezas naturais e procuram provar o caldo mais quente das cidades. Capítulo a parte sobre infidelidade, são turistas inveterados que danam os cajados de pastores e freis e suas irmãs ! Traçam o que existir no underground das boates ou bares e invadem os melhores lugares hetero, frequentados pelos nativos locais. Nas choperias, na Help ou Noites Cariocas, nos Años Locos em Buenos Aires, nos Jardins paulistanos do Espaço Massivo ou Puerto Livre. Fico por aqui para não parecer blasé. A maioria dos mortaes dorme, ignorando moças e chicos e santinhos sejam marginalizados pela economia formal, sejam ao contrário, adoradores de capitalistas trocas, melhor hipótese: jovens da atualidade, em que idioma optarem.
            As melhores galinhas são aquelas que comemos com fome ou à cabidela mesmo, agora as piores? Não foram atiradas sobre uma prefeita petista antipática nem no campo de um temperamental Romário, da Vila da Penha, que venceu e pode gastar R$ 50 mil por ano, apenas com IPVAS da sua frota: o dinheiro é privado e “cada um” com seu cada um... Na Democracia temos a liberdade de dar esmola ou ensinarmos o que quisermos, desde que alguém queira aprender, inclusive abusados estudantes do Largo de São Francisco, que não jogam nada e só fazem criar polêmicas! Valeu baixinho, pela Copa de 94! Mas, as piores galinhas são difíceis de pegar, tão lá em BSB... Queria agarrar pelo menos uma e torcer com muito carinho o “pescocinho”, depois uma faca elétrica, presente de natal, até rasgar as “veinhas” da consumista: compram um vestido de cem mil dólares  e depois saem ciscando em suas Mercedes de farol redondo, com motoristas multi uso. Lazer intelectual que brigaria com a maioria “regra três” de Brasília, meretrizes oficiais, que acumulam milhagens na Air France. Na verdade, nem conseguiria achá-los por aqui, em Ipanema ou na Asa Sul. Precisaria viajar muito mais! As verdadeiras galinhas tropicais vivem no Bayside...  
                                                            RJ, 06 de março de 2004.
                                                             Abraços do Dr. Guto
   1 train de grand velocité.       


sexta-feira, 25 de janeiro de 2013


HOTEL LONDRES

                                                    Fonte: IMAGENS DA AVIAÇÃO NAVAL 1916/ 1923.
                                                               Editora Argumento, págs. 102,103.

Deste cenário não restou nada na paisagem do atual Posto 4.
O elegante Hotel de Londres, à direita, de frente para a praia,
foi demolido nos anos 40. Próximo a ele, o castelinho em que
morava o médico e barão Jaime Luiz Smith de Vasconcelos,
construído em 1915, a partir do projeto do arquiteto Antonio
Virzi foi ao chão em 1964. As outras casas e os pequenos
prédios também morreram para dar lugar a grandes edifícios.
       A avenida Atlântica já aparece pavimentada e duplicada,
obra do prefeito Paulo de Frontin em 1919. E aparece em
reformas, já que a grande ressaca de 1920 a destruiu em parte,
levando o prefeito Carlos Sampaio a refazer muitos trechos.
Em 1922, depois que Sampaio é substituído por Alaor Prata,
nova ressaca forte e novo estrago, o que levou a prefeitura a
usar alicerces de concreto. A largura que a avenida tinha nesse
período se manteve a mesma até 1968, quando então foi ampliada.
Note-se na parte direita da foto como havia áreas virgens de
construções.



BICAS DE UBERABA


A sopa de letras ia desfazendo-se em movimentos sem conexão: quanto mais molhadas, mais vivas se tornavam, até sumirem no redemoinho de riscos solares, amparadas pela borda mais suja e por um braço cansado. Vidas usadas em abundância sobre tintas gastas que evaporam notícias, diariamente, semanalmente, ao longo do anos, no aproveitar de jornais amontoados em algum canto e reciclados pela noite; o alimento dos que trabalham; o deitar de um cachorro ou simplesmente um brilho que limpa e dissolve  letrinhas.

           Era dia de feira no Bairro Peixoto, feira livre já ameaçada pela burocracia dos que governam, em vão: voltou ao recanto tranqüilo de Copacabana, velhas chácaras - tradição africana – espalhada  pelas freguesias e  cidades.  Verdureiros que um dia foram libertos e subiram os morros apenas com cestos de palha...  Nesses dias me intrigava: não tinha mais vigor e insistia em pendurar-se pelos batentes: “Dona, desce um pouco desta janela”. Com dificuldades e “cara amarrada”, foi dobrando-se ao apelo que entendera como ordem: “Doutor, ainda não terminei essa janela”.  Disse não haver importância e pedi novamente que não me tratasse com formalidades, pois não era cliente, o que por certo nem entendeu ou resistiu a entender, falando: “Sim Dr., mas não fica bem, né? O Sr. é patrão e sempre tratei meus patrões assim...”. Na verdade, era apenas um filho que, às vezes, encontrava-a trabalhando na casa de minha mãe, que também pagava outra faxineira mais jovem (continuam lá) porém, ainda assim, a pedido de um amigo da família, chamava-a quinzenalmente para ajudá-la. Quando apareceu com uma sacola de papelão, trouxe pouca muda de roupa e curiosidades distantes deste mundo: cantava trechos de O Guarani, músicas antigas e rápidas palavras pentecostais, completamente confusas... Recusava bifes de carne no almoço e era arisca a quaisquer solicitações de ajuda. Certo dia perguntei: “Dona, quantos anos a senhora tem?” Ela com maestria  conseguia trazer perguntas onde faltariam respostas: “Ih, já nem sei Dr., trabalhei muito no Hotel Londres...1 Bati muito amendoim na roça, às quatro da manhã...” 
            Aos poucos fui tentando entendê-la e sempre que podia, fazia questão de ir lá no meio da semana perguntar-lhe algo, interrompendo o serviço... Pretexto para novas conversas, sem que percebesse a tentativa de decifrar seus enigmas.  “Dona, onde a senhora nasceu?” Gravei a resposta: “Ih, faz tempo, nasci lá nas Bicas de Uberaba...” Em respeito, nada perguntava, só respondia (à sua maneira, respondia), depois retirava-se ao trabalho ou à cozinha.  Naquele dia inovou, sentando-se numa das cadeiras de laca da mesa (negra como ela), olhou-me fixamente sem torcer panos e com as mãos molhadas sobre o vidro, perguntou altiva: “Dr. o senhor conhece as Gerais?” Surpreso respondi algo sem importância na hora. Hoje, paro para refletir aquele momento: uma trabalhadora de 71 anos não estava apenas descansando. Pelo tom de voz, falava de Brasilidade: das Gerais! A quais “Sertões” estaria referindo-se? Como se no subconsciente perguntasse: “Vocês já andaram pelas estradas batidas de terra? Sabem o que é trabalho escravo? Sabem o que é ser “brasiguaio”? Na caatinga, nos seringais, no imenso cerrado”.  Eram palavras soltas de uma “candanga” do Sudeste, sofrida, doente de reumatismos, catarata em uma das vistas. Solteira, sem filhos, sem instrução, sem companheiros! Sem teto (morava num “quartinho” de empregada, no trabalho da irmã); assaltada na cidade, carteiras de trabalho perdidas (só restavam um documento de plástico azul: o CPF e sua fé); sem certidão de nascimento (milhões nesse país nunca tiveram uma simples certidão!) Ali, cantando Ópera...
          Por um instante queria ter dito sim! Que conhecia e mais de uma vez. Dizer sem ofendê-la, que existe um trem “Maria fumaça” que sai de São João Del Rey e segue pelas curvas de Mariana e Ouro Preto, descendo pelas terras de Chica da Silva, Chico Xavier e do Alferes Xavier, de um Mestre chamado Aleijadinho e candangos que carregaram nos braços Tancredo e JK... Outros trens correm rápido, carregados de minério baratos rumo à Tubarão e Vitória; de retirantes que vindos de Brasília, passam por Barbacena  (onde localiza-se a Epcar 2) e  seguindo,  fazem artesanato em pedra-sabão e potes de doces caseiros. Vêm rumo às grandes cidades, ignorando o Juiz de Fora, tão próximos do Rio. E lavam no Rio, conhecem as ladeiras de belos horizontes e um aeroporto distante que traz gente enganada pelos “coiotes” 3 e também descrentes de tudo.  Na cidade industrial de Contagem, lembro dos colchonetes no estádio, reuniões de estudantes e farta comida mineira. As águas de São Lourenço, Araxá, maravilhosas, termais e temos alguns amigos lá (inclusive pela Net) e convites para voltarmos. Bons mineiros de Matias Barbosa no Rio e em Portugal, amigos portugueses também: Lisboa, Faro, Viana do Castelo! Agora vou realmente viajando pelas Bicas de Uberaba... Culpa da Dona Luiza! Se deixei de falar, escrevo por ela, até descobrir que nascera em pequena cidade do interior e  seu pai era lavrador de feijão, que se emocionou ao assinar o nome etc.
        
 “Como a senhora não tem certidão de nascimento? Roubaram sua identidade?” Na tarde seguinte, após ligação de segundos para o cartório de Bicas, providenciei algo que esperava desde 1925. Levei-a de carro para tirar retratos e sorrindo sem chapa  (esquecera na pressa de sair), quando um funcionário pediu que “tocasse piano” naquele posto do Automóvel Clube (se ainda existe, sou sócio remido e tirei ali, carteira internacional de motorista). Mês seguinte, uma maratona de atestados médicos (postos municipais de saúde) e declarações por nós firmadas, que era pessoa idônea e bastante carente: exigentes e burocráticos  papeis – INSS - tentar um benefício de um salário mínimo – pouco, mas sobrevivência para alguém que lutou a vida inteira e  nem isso conseguiria mais ganhar ...
          Vejo pela televisão um dos mais sérios senadores que já passaram por aquele plenário azul e monótono, beijar o presidente que embarca rumo ao Taj Mahal, porque seu projeto de renda mínima foi sancionado: louvável iniciativa! Tento imaginar o que sentem estas pessoas  que desperdiçam oportunidades e são tão necessitadas. Indaguem os motivos: apenas são, jamais entenderemos! Concessão precária, já existia desde 1990, não sei precisar de memória,  conhecida como  Benefício B88, especial,  não divulgado ao grande público,  restrito à múltiplas exigências e  aos senhores da lei. Com certeza avançamos  um pouco. Descubro lendo (Rio de Janeiro/imagens da aviação naval), talvez idéia de um almirante chamado Max, quem tivemos oportunidade de ouvir, assistindo palestras na Ilha Fiscal, aprendendo  acerca do Centro Cultural da Marinha,  espaço merecedor dos mais altos elogios. Militar com tantos serviços prestados, ensinando inclusive a outros militares nacionalistas que honram a cultura deste país! No livro sob sua coordenação está uma imagem despercebida, entre dezenas instigantes, que por ousadia  vou escanear (melhor ilustração); assunto falado que  nunca conseguiria visualizar.Terá trabalhado desde menina nas chácaras?
           Vez por ano aparece religiosamente e está bem, obrigado. Mudou-se para o Cabuçu ou terá sido Xerém? Sei que foi morar com  uma prima, dividindo despesas. Mesmo evangélica, consegui cadastrá-la em uma Igreja Católica e recebe uma 2a cesta básica... Operou Catarata gratuitamente naquele brilhante projeto do ministro Zé Serra e está enxergando com lente importada! Tomando sol  pelas tardes, melhorou bastante o reumatismo e já fez uns seis recadastramentos na Previdência, maldade que sempre reclama, mas aprendeu a ir sozinha! Desconheço se chegou ao ponto de ir dançar nos bailes da 3a idade... Traz todo fim de ano uma garrafa de vinho Almadén, tinto (deve ter me ouvido comentando a qualidade dos vinhos do sul), e satisfeito estive a pensar: se ajudassemos mais às pessoas e bebêssemos sobretudo água, poderiamos ter  boas adegas em casa! J

                                                                Rio, 01 de fevereiro de 2004. 
                                                            Dr. Guto.


1 Hotel na orla de Copacabana, demolido nos anos 40
2 Escola Preparatória de Cadetes do Ar
3 Agenciadores de imigrantes ilegais










sexta-feira, 4 de janeiro de 2013


BATATAS SEQUINHAS

         Acertar na dieta é como acertar na loteria. Sempre estamos lutando contra balanças, os triglicérides que se formam nas artérias e fluindo próximos aos números da infelicidade. Comidas saudáveis são insossas, por mais que vegetarianos gritem e adeptos fervorosos de saladas receitem o extra virgem. Comer bem é um sacrifício: melhores serão os tomates secos ou molho Italiano sobre as folhas ou pão mesmo com salame, não ficando atrás do saboroso parmesão fatiado. Churrascos no sal grosso e fartos buffets sem culpa! Feijoadas no jabá desfiando, paio e lingüiça fininha, cozidas no fogão à lenha? Um arroz branco carregado no alho! Hummm... Pavê de chocolate, sorvetes em calda e muitos, muitos doces mineiros, acompanhados dos adorados refrigerantes. Isso sim é comer: camarão VG à Baiana, moqueca de peixe com polvo, pirão de lula à Provençal! Paellas, aquela lasanha de presunto, muzzarela e creme de leite. Sim, tudo engorda. O que nunca satisfaz é um partido político...

                  Felizmente não sabia disso e naquele ano de 88 voltava convidado a ingressar no PMDB, jovem idiota e contestador sempre procurei os caminhos mais difíceis: achava que não teria graça padrinho político tão influente. Depois o MDB já não era o mesmo. Assim, após aventuras em Brasília, chamei algumas funcionárias e amigos da Faculdade para irmos à sede da Associação Brasileira de Imprensa, cujo terreno do imóvel foi doado no Rio de Janeiro, assistir ao lançamento de uns Tucanos... “Bandinha” de música animada e não eram a rural UDN, muito menos ala moça do urbano PSD, nem um grupo de progressistas do ontem com avançadas e constituintes idéias. Lá na frente um professor, sem gravata e manga de camisa dobrada, azul, bem eloqüente! Ao seu lado, um engenheiro de Santos e o velho Montoro, que ensinou Direito do Trabalho a uma prima na Mackenzie, entre tantos mandatos e alunos ensinados; ficamos ali ouvindo-o se esgoelar e suando pela falta de ar condicionado e quando terminou o discurso, até me emocionei com as palavras (nessa época era mais sensível). Virei-me para a Magaldi, uma secretária concursada em duas Universidades que foi posteriormente obrigada a exonerar-se de uma matrícula mal paga e não era médica ou professora... Mentalidade atrasada de nossas elites em exigir 48 horas semanais, quando países sociais democratas já avançam para menos de 40 horas. “E aí, está gostando?” A hilária resposta ficou gravada na memória e escrevo: “gostando? Estou adorando: esse homem é um gato! Preciso namorar um coroa desses!” Deu sua peculiar e sonora gargalhada. Sinceramente, esperava respostas diferentes de uma bem humorada viúva, mas a partir daquele instante começou a ensinar-me a lógica do voto feminino. Era bem mais politizada que eu! Qualquer dia telefono para ela e pergunto se ainda vota naquele acabado ou no feio Zé Inácio.J
               Quase detestávamos os barbudos: vestiam-se mal, pobres em idéias e sempre contra tudo nas reuniões do CALC.1 Pior, a nível nacional achavam-se banhados no Rio Jordão como se não fossem humanos. Se pelo menos tivessem humanos na Política... Mudaram um pouco. Mudei também vítima da burocracia: “por que tenho que ter a ficha abonada? Só quero me filiar”; “Porque sim, procure um parlamentar”. Como é bom filiar-se a um Partido sem conhecer ninguém! Um mundo a descobrir, inclusive que nem precisava mandato para abonar coisa alguma ou tumultuar, comecei enganado. Maria Helena me socorreu perto da Vera Lúcia de Oliveira, antiga funcionária da faculdade, próximos estavam Valter José Oliveira (fiscal prodígio aos 21 anos) e o Eduardo Gusmão (atualmente Juiz de Direito no TJ), e ela falou: “filha, não pode ser você mesma? Tem algum vereador de interior aí? Só serve se for do interior!” E voltou a gargalhar. Sim, ríamos bastante quando reunidos nas eleições, ali então ao som da marcha: “cidade maravilhosa cheia de encantos mil...” Não tinha. Um partido que nascia sem vereadores. Boa idéia - extinguir todos os cargos de vereador no Brasil e remunerações! Seriam substituídos por Conselhos Comunitários da Sociedade Civil, voluntários, e o dinheiro economizado iria para a FOME ZERO! Com única jogada, em vez de fecharmos Bingos, faríamos strike no desemprego secular de muitas famílias do interior, copiado da Constituição Americana em 1891. Enxugaríamos gaiolas de ouro inúteis e melhor fiscalizaríamos Assembléias que gastam milhões com redes de televisão fechadas, não assistidas pela maioria dos brasileiros. Ok, mas tentem abrir os sinais de satélite e continuem melhorando: aprovem mais cargos DAS... (ontem sintonizei a TV Senado). Volto. Estávamos ao lado deles, porém faltaria sentido pedir a FHC que abonasse uma ficha. Tentava ser coerente e ao mesmo tempo cumprir as regras impostas por ninguém. Eram três deputados na bancada fluminense (estaduais, raras exceções, nem sabemos os nomes): um escritor meio desligado, um empresário deslumbrado e uma mulher advogada, esta última mais progressista, Anna Maria acabou abonando a ficha: “é de jovens, idéias novas que este País precisa”. Pergunto: existem idéias novas? É fácil ser jovem convivendo com velhos? Se pelo menos os estudantes invadissem os partidos e tomassem os diretórios! Ficariam velhos também? E se elegêssemos apenas uma vez ou no máximo duas? O que fariam depois? Política é profissão e as lutas sociais não se encerram em contados anos. Que as lutas sigam? Que plantem batatas no campo! Pelo menos não viveriam sempre tentando reeleições e reeleições até ocuparem cargos ofertados em presente quando perdem os pleitos. Triste e real constatação. Ao contrário, argumentam serem assuntos complexos para novatos. O próprio Povo faz a seleção democrática: culpa nossa mesmo, independente de governantes, em vez de apenas reclamarmos, deveríamos reaprender a dizer obrigado! Obrigado por sermos cidadãos livres e podermos fazer algo melhor, porque uma única agremiação no Congresso não faz verão nem dieta...
                   “Guto, o que você faz aqui? Há um ano freqüenta este escritório e ainda não falou com o Paulo Alberto2. Assim me parou Luzia Souza, uma assessora que largou o emprego na Câmara dos Deputados para ir viver em Portugal com o noivo (hoje têm dois filinhos portugueses-brasileiros em Viana do Castelo). Na verdade, ia à Rua Álvaro Alvim por ser provisório ninho, nem lembrava... Já em 93, cassado o Collor Feião, aproximava-se à chance presumida de vitória e em todos os estados organizava-se a máquina novamente contando-se “soldadinhos”. Agora um imenso sobrado no coração do Largo de São José era a sede partidária e no andar térreo funcionava o Timpanas, restaurante antigo no Centro do Rio: ali sentados ficamos os três conversando assuntos aleatórios regados à cerveja Bohêmia: “então vocês indicaram o representante da Juventude?”, Consertei dizendo que também era indicação pessoal do SerginhoCabral, além do Pedro Câmara e como sempre muito boas idéias. Não gostou do elogio, mesmo sabendo que se houvessem grupos, seríamos do seu, esfacelado e disperso. Lalu era nome certo em todas as chapas, entretanto, sofria resistências no setor financeiro, ótimo!  Marcellista era o garçom e serviu rápido uma porção de fritas portuguesas fumegantes em fartura, aproveitei para cobrar: “e ai, vai me bancar no Diretório?” A resposta foi assim: “nossa, que batatas sequinhas! Prove só...” Comemos frituras e continuamos sem beber sucos, seguindo melancólicos: Artur “por que essa preocupação em continuar? Pouco se resolve nos partidos, vão namorar”. Não insisti uma segunda vez, mastigando lentamente as batatas... Alguém se aproximou da mesa (como são boas essas pessoas que nos acompanham pelo tempo e aparecem de repente em qualquer lugar!) e falou sorrindo: “Tu sempre nas bocas, né? Só te vejo em reuniões” Heleni Rosa estudava Filosofia no INFCS e até então, nunca conseguira passar em um concurso público, mesmo em dificuldades, não desistia de tentar. Sentia orgulho dela e foi muito importante sua aproximação naquela tarde (atualmente é funcionária concursada). Concluiu algo assim bem seca: “Guto, ouça uma coisa: tudo que conseguir dos políticos ainda pagará em dobro às pessoas comuns...” E se despediu. Que bom! Ela não era o tipo que falava para agradar e senti que irritou bastante a observação na frente de um.
                Obrigado Vera, Magaldi, Heleni! Amizades sinceras que perduram, obrigado amigos pelas palavras perdidas e dicas abandonadas, pelos seus livros de música brasileira e biblioteca tantas vezes visitada! Conhecía-os e nenhum cargo ganhei, também nunca pedi, mas posso pagar em triplo ou quádruplo! Idéia inspiradora guardada, depois de ajudar uma campanha vitoriosa em 94, seria logo me afastar e viajar com a fofinha Lalu. J
                                                                        
                                        Dr.Guto, Rio, 29 de abril de 2004.
1 Centro Acadêmico Luiz Carpenter.
2 Senador Artur da Távola.

                                                                                    



domingo, 30 de dezembro de 2012

51 E HAVAIANAS


51 e Havaianas 

      Poxa, eu só queria uns trezentos pesos para comprar mais caixas de alfajores havanna... Penso isto enquanto vou lendo uma manchete sobre enriquecimento de 562% no patrimônio dos Kirschner (mais de doze milhões de dólares), em oito anos de poder, o nome dessa gente nem quero saber porque de cleptomaníacos de ilusões estou cheio! E pergunto: “se aqui eles estão no poder há cinqüenta anos? Quantos por cento temos que calcular de acréscimo?”
       Eles quem? Não se deve generalizar, há sim os camundongos gordos, vêm da banda de música da UDN, outros bigodudos velhos também do PSD, mas existem bigodinhos novos empolados de estrelinhas no peito que voaram, voaram e voam até pouco tempo às nossas custas e nunca disseram nada, porque cabe à imprensa livre descobrir e denunciá-los! Esqueçam, vamos conversar  amenidades, confeitos e festinhas de crianças, o Mickey Mouse, a Clarabela, os irmãos metralha, frutos da imaginação de quem virou parque temático em um grande laranjal pertencente a um Sr.chamado Orlando, depois na Ásia e em Paris, divertidos parques, aqui é mais! E quando ainda era Getúlio Dornelles Vargas o presidente, estiveram Disney, Orson Welles, Bete Davis, Carmem Miranda, Francisco Alves, Evita Perón, um certo visionário Sr.Joaquim Rolla, que nomeia justamente a rua do lago e tantas outras celebridades se hospedaram na piscina térmica e funda do Hotel Quitandinha, em Petrópolis. Como não se lembram?Até eu, reles mortal mergulhei naquela piscina quando era guri e depois ficávamos vendo as araras, aratacas, calopsitas, canários, naquela gaiola alta e linda que ficava em amplo corredor... Hoje o SESC adquiriu todo o 1º andar do extinto cassino e vai concluindo as reformas. O lago em frente ao castelo em estilo normando tem o formato do mapa do Brasil (bem mal feito por sinal), onde resistem um pequeno farol e uma churrascaria, pedalinhos e canoas deslizavam pelas águas frias da serra, lago construído assim como o gigante Paranoá e seus terrenos comprados a preço "de banana" por senadores e onde construíram e revenderam “a nova classe” e embaixadas, belas mansões... Quem sai do Rio de ônibus a caminho do planalto central, pela rodovia Washington Luis, avistará o suntuoso cassino em meio às matas de floresta atlântica, que estudamos ser de clima tropical de altitude, o melhor em minha opinião. Seguiremos pelas Minas Gerais e a esburacada Goiás. Ah sim, pelos vales despencam casas de sonho, cachorros boxers, pastores e dog alemães a rangerem os dentes nos portões, como eram as festas regadas à chivas e bolinhas infantis arremessadas, nos salões de estofados rosa, decoração estilo art noveau hollywoodiana, combinando bem com a garagem para poucos veículos, não mais de cem calhambeques e fords, um ou outro bugatti conversível, que chegavam trazendo mocinhas para praticar arco e flecha e beber coquetel de frutas sem álcool à beira da piscina. Ah, tempos de roupas talhadas no alfaiate! Decotes comportados e gumex nos cabelos. Piteiras e ainda alguns decadentes chapéus, pois a moda destes caiu por terra pelos anos 30. Para distante América cafeeira Santos Dumont trouxe um inovador chuveiro (um balde furado) da 1a guerra, e um telefone. E imaginar que, ainda nos anos 60, em São Paulo, levavam-se horas para completar uma ligação via telefonista a outro ponto... Somos este mosaico, nossos avós imigrantes ou retirantes sem comunicação, em meio aos coronéis do agreste e serrado, outros travestidos de sulistas e separatistas, igualmente estancieiros e chulos, a revezarem-se no poder. Infelizmente, dos partidos trabalhistas nasceram Inácios, Delúbios e Letícias etc a trajarem-se com estilistas de grife, a comprarem land rovers e tentarem jogar golfe, completamente inédito, completamente tupiniquim, eles  precisavam disso? Uma caninha 51 e havaianas já os fazem felizes!
        Nós temos o segundo operário eleito na História, e daí? Ignorou multidões e apegando-se ao poder e às velhas raposas de sempre fingiu melhor que antes saber de nada. Vamos vivendo. As favelas aumentando, inclusive no sul, governados pela ala nacionalista, aqui no Rio de Janeiro também perderam, eram 800 e poucas favelas nos anos80, já superam mil, e os carros chineses estão chegando, três novas montadoras! Vamos financiar, murar as linhas de sonho! Vamos pintar os barracos de colorido para alegrar Michael Jackson, resumindo a ópera - o capitalismo é uma merda e Socialismo uma máscara de Chávez no carnaval!Vereadores se auto-reajustando, bailes e bailes... Continue Sarney, vá para o inferno de fardão, pelo menos você nunca enganou ninguém!

*Dr. Guto prefere alfajor havanna blanco...